Bajo una persistente lluvia una multitud participó de la Fiesta Grande del Señor de los Milagros de Mailín

Una multitud participó ayer de la Fiesta Grande del Señor de los Milagros de Mailín, según estimaciones de la policía unas 200.000 personas llegaron a la Villa a dar gracias y a pedir.El obispo Monseñor Vicente Bokalic encabezó la misa que fue seguida muy atentamente a pesar de que una persistente lluvia caía sobre la Villa en ese momento.
Al momento de la homilía, el religioso se refirió al regreso de todos a ese lugar. “Que lindo es estar aquí con mis hermanos, volver a Mailín, tan humilde, tan pequeña, como son todas las cosas de Dios”, expresó. Ante la atención de miles de fieles que se congregaron en el lugar, el religioso enfatizó con convicción en el “gran mensaje para nosotros”, cuando “de la cruz de Jesús irradia la luz para todos los pueblos, para toda la historia”. “Así comenzó la historia hace 200 años, de un hueco de un algarrobo”, dijo y agregó que la “cruz tenía un poder especial de atracción que movilizaba a todos, a los alejados, a los abandonados, a todos los pobres de la región y así se inició una historia de amor y de esperanza. Hoy venimos a agradecer y renovar esta alianza de amor, fe y esperanza en Jesús”, cerró.